Decir algo que no se sepa acerca de los Beatles a estas alturas es un poco difícil. No obstante, todavía de vez en cuando salen a la luz nuevas historias relacionadas con ellos.
Si desde el principio no dejaron de superarse a si mismos y de sorprender al mundo con cada nuevo disco que sacaban, con el álbum Sgt. Peppers Lonely Hearts Club Band fueron más allá de todas las previsiones. Desde todos los puntos de vista, este disco es una obra de arte que desafía el tiempo y las modas. Hay dos canciones que en un principio iban a formar parte de este legendario álbum, pero que finalmente se publicaron en un single antes de que saliera el sargento pimienta... de ellas les hablará Geoff Emerick, ingeniero de sonido de los Beatles.
Artista: The Beatles
Disco: Penny Lane / Strawberry Fields Forever
Año: 1967
Género: pop rock
Nacionalidad: inglesa
Año: 1967
Género: pop rock
Nacionalidad: inglesa
Lista de Temas:
01. Strawberry Fields Forever
02. PennyLane
01. Strawberry Fields Forever
02. PennyLane
Alineación:
John Lennon / guitarra rítmica, vozPaul McCartney / Bajo eléctrico, piano, voz
George Harrison / Guitarra solista, voz
Ringo Starr / Batería, voz
Sobre el legendario Sgt. Peppers Lonely Hearts Club Band de los Beatles, se han vertido ríos de tinta, pero, aún así, este fabuloso álbum sigue dando sorpresas y periódicamente vuelve a ser noticia.
Mi amigo Justo me regaló hace tiempo un libro que casi literalmente devoré, "El Sonido de los Beatles", de Geoff Emerick, ingeniero de sonido que trabajó con ellos en la grabación de gran parte de sus álbumes. Me resultó fascinante descubrir de la mano de uno de sus protagonistas cómo era el proceso de grabación de un disco en aquella época, máxime tratándose de ese disco en particular. Una de las cosas que descubrí en este libro es que las canciones Penny Lane y Strawberry Fields Forever que en un principio estaban destinadas a ser incluídas en el Sgt. Peppers, justo al final de su grabación, por una decisión de George Martin y Brian Epstein se lanzaron en un sencillo, antes de que saliera el álbum. En este post me voy a ocupar, en particular, de la producción y edición de esas dos canciones.
La totalidad del Sgt. Pepper's fue grabada en un 4 pistas. Para hacernos una idea de lo que tenía que sudar un ingeniero de sonido en una grabación de aquella época, les transcribo un pasaje del libro donde Geoff relata su primera grabación de estudio en la EMI. Se trataba de una pieza operística:
"Mi primera sesión oficial como ingeniero auxiliar tuvo lugar en el estudio 1, en cuya pequeña sala de control sólo se podían sentar cómodamente tres o cuatro personas, en contraste con la enorme zona del estudio, donde cabían orquestas enteras. La grabación del día era una ópera: Cosi fan tutte de Mozart, con Elisabeth Schwarzkopf. Aquella música me encantaba y, por supuesto, ella era una cantante fenomenal, pero resultó ser una pesadilla logística. Todas las sesiones clásicas importantes se grababan simultáneamente en cuatro grabadoras de dos pistas; la cinta que sonaba mejor se designaba como máster, y las otras tres servían como copias de seguridad. Eso significaba que no sólo tenía que vigilar cuatro máquinas (manteniendo limpios los cabezales y asegurandome de que la cinta estuviera bien ensartada) sino que, como los tiempos de la sincronización electrónica quedaban todavía muy lejanos, también tenía que poner en marcha y detener cada grabadora de manera individual. Como quiera que cada máquina funcionaba con su propio reloj mecánico, tenía que registrar manualmente el minutaje de cada toma en todas las cajas de las cintas, además de escribir mis propias notas relevantes. También tenía que estar constantemente al tanto de cuánta cinta quedaba y juzgar cuándo se iba a terminar. Lo último que querías era que la orquesta o la cantante hicieran una toma fantástica, y luego tener que informarlos de que se había terminado la cinta.
Luego estaba la tarea física de cambiar constantemente cuatro carretes de cinta. Al no haber ninguna placa de refuerzo, a veces la cinta empezaba literalmente a elevarse por encima de las guías y salía volando de la máquina mientras tú intentabas volverla a colocar en el carrete lo más rápido que podías, y todo ello con los músicos esperando, y el tiempo era oro. Tenías que ser muy organizado, y podías tener un buen problema si se te bloqueaba la mente, porque en un momento podían pedirte que reprodujeras la toma 39, y luego decidir que iban a grabar la toma 62 en un carrete totalmente diferente, todo ello en cuatro máquinas diferentes. Era mentalmente agotador, como hacer malabares con diez pelotas a la vez. No es de extrañar que volviera a casa todas las noches con un tremendo dolor de cabeza."
Geoff no ubica este episodio en una fecha concreta, pero a tenor de su relato, debe haber ocurrido a comienzos de los años '60, época en la que los Beatles saltaron a la fama."
Strawberry Fields Forever
Más adelante, Geoff se convierte en ingeniero de los Beatles y graba con ellos varios discos, entre ellos Revolver. Revolver fue una verdadera revolución en la música de su tiempo, hasta el punto de que tanto los fans cómo la crítica dudaban que los Beatles fueran capaces de hacer algo todavía mejor. Por eso, la expectación general con respecto al próximo álbum fue muy grande.
Seguimos escuchando el testimonio de Geoff, que ahora nos habla de los antecedentes de Sgt. Peppers. Cuenta que hubo una primera reunión de los cuatro Beatles con él y con George Martin, el productor de la banda, para decidir el rumbo que iba a tomar el nuevo álbum. Al finalizar la reunión, Martin les dijo:" bueno, vamos a trabajar. Qué me habéis traído?" a lo que John se apresuró a contestar que tenía algo bueno que mostrarles. Y efectivamente, fue así:
-"Desde la primera nota, quedó claro que la nueva canción de Lennon era una
obra maestra. Había creado un homenaje delicado y casi místico a un lugar misterioso, un lugar al que llamaba Strawberry Fields. Yo no tenía ni idea de qué trataba la letra, pero las palabras eran cautivadoras, como un poema abstracto, y había algo mágico en el
timbre inquietante y lejano de la voz de John.
Cuando terminó, hubo un momento de
asombrado silencio, roto por Paul, que con un tono suave y respetuoso se limitó a
decir: Es absolutamente genial".
Paul compuso la introducción de la canción y los arreglos de flautas con el nuevísimo instrumento que acababan de descubrir: el mellotrón.
- "A Strawberry Fields Forever se le dedicó más tiempo
y
atención que a cualquier
otra canción
que John Lennon grabara nunca con los Beatles, incluso más que a obras maestras posteriores como A Day In The Life y I
Am The Walrus. Cuando la
nueva
versión
estuvo terminada,
adornada con toda clase de instrumentos
exóticos como
el piano de martillo,
los platillos a
la inversa y
el swarmandal de George Harrison (un instrumento indio parecido a un arpa) y estuvo mezclada a satisfacción de
todos, nos esperaba todavía una sorpresa."-
La sorpresa era que, después de realizar múltiples sesiones, John aún no estaba satisfecho, y quería que se empalmaran dos tomas que estaban a un semitono de diferencia la una de la otra, y en tempos diferentes .
-"Desde los días de Revolver, nos habíamos acostumbrado a que nos pidieran lo imposible, y sabíamos que la palabra no no existía en el vocabulario de los Beatles. Pero aun así, la petición de John parecía totalmente inviable dada la tecnología de la época. Hoy en día, un ordenador puede cambiar fácilmente la afinación y/o el tempo de una grabación de manera independiente, pero lo único que teníamos nosotros a nuestra disposición era un par de tijeras para editar, un par de grabadoras de cinta, y un control de variación de velocidad. El problema era que tan pronto como aceleras una cinta, la afinación también sube; ralentizar una cinta ejerce el efecto contrario, ralentizando el tempo, pero bajando también la afinación. Teníamos pocas opciones, pero estaba dispuesto a probar si aquello era posible.
Por suerte, como George Martin ha dicho muchas veces en los años que han transcurrido desde entonces, los dioses nos sonrieron. Aunque las dos tomas que John quería empalmar habían sido grabadas con una semana de diferencia y un enfoque radicalmente distinto, las claves no eran tan diferentes (apenas un semitono) y los tempos también eran bastante parecidos. Después de algunos experimentos de ensayo y error, descubrí que acelerando la reproducción de la primera toma y ralentizando la reproducción de la segunda, podía conseguir que encajaran tanto en afinación como en tempo.
A continuación, tuve que encontrar un punto de ensamblaje adecuado, que no fuera demasiado evidente. Al fin y al cabo, la idea era hacer creer a los oyentes que estaban escuchando una interpretación completa. El lugar que elegí resultó caer exactamente a sesenta segundos del inicio de la canción, al principio del segundo estribillo, sobre la palabra going (Let me take you down / ‘Cause I’m going to…). Ahora era cuestión de buscar exactamente dónde alterar la velocidad de reproducción. George y yo decidimos dejar que la segunda parte sonara hasta el final a la velocidad más lenta; esto proporcionaba a la voz de John una cualidad grisácea y espesa que parecía complementar la letra psicodélica y la serpenteante instrumentación. Las cosas fueron un poco más difíciles en la sección inicial; comenzaba a un tempo tan perfecto y lacónico que no queríamos acelerarlo desde el principio. Por suerte, las máquinas de cinta de EMI estaban dotadas de controles de variación de velocidad muy precisos. Con un poco de práctica, pude incrementar gradualmente la velocidad de la primera toma y llevarla a un punto preciso, justo hasta el momento en que sabíamos que íbamos a hacer el empalme. El cambio es tan sutil que prácticamente no se nota.
Todavía había un último obstáculo que superar. Descubrí que no podía cortar la cinta con el ángulo normal de cuarenta y cinco grados porque el sonido daba un salto. Al fin y al cabo, estaba empalmando dos interpretaciones totalmente diferentes. Por ello, tuve que hacer el corte con muy poco ángulo de modo que fuera más un fundido que un empalme. Tardamos mucho tiempo en conseguir que todo funcionara a la perfección, pero sentíamos que dedicar todo aquel tiempo estaba justificado porque Strawberry Fields Forever nos parecía una grabación histórica."
Penny Lane
"El grupo iba a dedicar todavía más tiempo a Penny Lane que a Strawberry Fields Forever; tres semanas enteras, lo que en aquella época era una cantidad enorme de horas de estudio. A diferencia del resto de temas de los Beatles grabados hasta entonces, empezamos con Paul tocando el piano en solitario, en lugar de los cuatro tocando juntos la pista de ritmo. Cada una de las partes, excepto la pieza de piano principal, fue un overdub. Los demás se pasaron días en la parte trasera del estudio contemplando cómo Paul añadía una capa de teclado tras otra mientras trabajaba totalmente en solitario. Como siempre, su sentido del ritmo fue absolutamente soberbio; la parte principal de piano sobre la cual construyó la canción era sólida como una roca, a pesar de que por entonces no había metrónomos ni claquetas. De hecho, Ringo ni siquiera tuvo que tocar un ritmo de referencia con el charles. Fue la base que proporcionó aquella pista de piano original de Paul lo que dio a la canción esa sensibilidad tan fabulosa.
El único problema que nos planteaba este enfoque era la disponibilidad de pistas. La grabación en cuatro pistas fue una verdadera limitación para esta canción en concreto, pues nos veíamos obligados a volcar continuamente las pistas y hacer reducciones (que a veces llamábamos premezclas). Al final, había tantos teclados mezclados, que terminaron convirtiéndose en un sonido único; al escuchar la grabación final, es difícil distinguir los instrumentos por separado. Algunos de los overdubs quedaron sepultados por la densidad de la instrumentación y el número de volcados. Aun así, Penny Lane contiene un montón de buenos sonidos.
Aparte de hacer coros y tocar un poco la guitarra rítmica, John contribuyó muy poco en «Penny Lane», y se limitó a golpear despreocupadamente un par de bongos. En realidad lo pasaba bien porque así podía hacer el tonto; nunca se tomó demasiado en serio el proceso de grabación. Grabar instrumentos diferentes, cosas que no fueran su guitarra eléctrica Rickenbacker de seis cuerdas o la guitarra acústica Gibson, lo aliviaba un poco: si no tenía mucho que hacer, se aburría enseguida. La sonora campana de bomberos, tocada por Ringo, salió del armario de efectos especiales que había bajo la escalera del estudio 2. Si los Beatles se quedaban encallados con un overdub, iban al armario a buscar algún artefacto (había parafernalia de sobras: máquinas de viento, máquinas de truenos, campanas, silbatos). Siempre que veíamos la puerta abierta, sabíamos que iba a ocurrir algo divertido.
A diferencia de John, que apenas tenía una vaga idea de cómo quería grabar Strawberry Fields Forever, Paul tenía muy clara la instrumentación que quería utilizar en Penny Lane. George Martin recibió el encargo de escribir un arreglo para flautas, trompetas, flautín y fiscorno, al que se añadieron oboes, trompa y contrabajo. Combinados con el bajo estelar y la soberbia voz de Paul (con coros de John y George), a mis oídos el tema empezaba a sonar pleno, refinado y prácticamente completo. Pero Paul no pensaba lo mismo. Todavía estaba buscando el último toque mágico, y la inspiración le llegó una noche en su casa cuando vio por televisión una interpretación del Concierto de Brandenburgo nº 2 de Bach."
"A la noche siguiente, estábamos en el estudio y Paul no paraba de hablar del tema.
- ¿Qué era la trompetilla que tocaba aquel tipo? - nos preguntó -.
¡El sonido que le sacaba era increíble!
La formación clásica de George Martin nos vino como anillo al dedo:
- Eso es una trompeta barroca - dijo -, y el tío que la tocaba se llama
David Mason y es amigo mío.
- ¡Fantástico! - exclamó Paul. - Hagámosle venir y que la añada al tema.-
Al cabo de unos días me encontré colocando cuidadosamente un micrófono delante de Mason, que era bastante conocido en el mundo de la música clásica como primer trompeta de la prestigiosa Royal Philharmonic Orchestra. El único problema era que no había ninguna partitura preparada para él, y tuvo que permanecer sentado durante horas escuchando como Paul tatareaba y cantaba los arreglos que oía en su mente, mientras George Martin transcribía las notas a mano. Por aquel entonces, tocar en una sesión de los Beatles era un encargo muy importante, y supongo que Mason consideró prudente mantener la compostura, aunque estoy seguro de que la falta de preparación debió de poner a prueba su paciencia. No obstante, por fin se consiguió una partitura a satisfacción de Paul, que se dirigió a la sala de control a escuchar el tema mientras hacíamos rodar la cinta. Como el verdadero profesional que era, Mason tocó a la perfección al primer intento, incluyendo el solo extraordinariamente exigente que terminaba en una nota alta casi imposible de alcanzar. Fue, sencillamente, la interpretación de su vida."
"Ese mismo día hicimos una mezcla que fue enviada a Capitol en los Estados Unidos para que entrara en fabricación, pues George Martin y Brian Epstein habían decidido ya que Penny Lane y Strawberry Fields Forever compondrían el inminente y esperadísimo sencillo de los Beatles, una decisión trascendental que eliminó ambas canciones del álbum Sgt. Pepper."
Penny Lane formó parte, junto a Strawberry Fields Forever, de un sencillo de 45 rpm con formato de doble cara A, ya que ambas canciones eran potencialmente comerciales.
el Canario
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Canario: decime por favor... ¿cómo se logran 1082 visualizaciones en una reseña en dos días y un solo G+?
ResponderEliminarjajajaj, son los fabulosos Beatles, amigo
EliminarEste comentario ha sido eliminado por el autor.
EliminarSí, pero nadie tiene la cortesía de poner un G+.
EliminarCuando la leo tengo la amabilidad de retribuir con un G+, aunque me guste poco. No en este caso, porque ni la leí porque The Beatles dejaron de interesarme hace 20 años, aunque me sabía por lo menos 30 canciones. Como la mayoría de mi generación y mis primos mayores que yo, aprendimos inglés con ellos.